sábado, 5 de septiembre de 2015

¿Quieres una casa de revista?

Seguro que muchos de vosotros pensáis que las casas de las revistas son bastante irreales, y es cierto que detrás hay un gran trabajo de estilistas que ponen, quitan y reordenan todo antes de las fotos. No se trata de tener la casa para la foto, pero sí de conseguir un ambiente armonioso y crear un espacio donde uno tenga ganas de estar. ¿Os apuntáis estos trucos?

Elige el color de pintura perfecto.

Es la base de toda decoración. Lo cierto es que sea cual sea vuestra elección de colores, pensad siempre un poco más allá: ¿cuáles son los tonos que os gustan en los textiles? ¿y el tipo de madera de los muebles? ¿cuenta vuestra casa con luz natural suficiente para elegir un tono más oscuro? Como podéis ver hay muchas cosas a tener en cuenta antes de elegir la pintura.



Tu baño, como el de un hotel.

Quizás sea algo difícil conseguir un baño perfecto cuando hay niños por el medio, pero en ese caso podéis decorar a la perfección el baño que reserváis para las visitas o ese aseo de cortesía que se usa menos. Hacedle una decoración vistosa: poned alguna planta, flores, jaboncillos naturales, enrollad unas toallas y colocadlas de formas originales, pintadlo de algún color bonito, añadid molduras, papel pintado y unos accesorios sofisticados. Las opciones son infinitas.





Tu habitación, tu suite.

Hacedla confortable y cálida, y si tenéis espacio, añadidle en una esquina un sitio para sentarte, un descalzador, orejero, una mini mesita con un jarrón con flores, y una alfombra para delimitar este mini-area de relax.



Mesas de salón y comedor.

Cread centros en la mesa de comedor, ya sean con frutos o flores de temporada, elementos decorativos, caminos de mesa…Procurad que siempre esté limpia y ordenada. Lo mismo con la mesa de centro del salón, utilizad libros bonitos, jarrones con flores, cestitas para los mandos de la tele, velas, botes decorativos y, sobre todo, ¡no tengáis miedo a cambiar!



Lamparas bonitas.

Aunque su función esencial es iluminar, después de tener más o menos claro los puntos de luz que necesitáis, buscad piezas que formen parte de la decoración, que no pasen desapercibidas e incluso que contrasten con el estilo de la decoración (Por ejemplo: una decoración muy minimalista con un chandelier muy vintage). Dejadlo para el final (siempre es lo último que solemos comprar en una casa, por razones de presupuesto) y así os haréis una idea de lo que la lampara puede aportar una vez la habitación esté vestida por completo.



Exteriores mimados.

Pensad en los espacios que queráis crear en el exterior de vuestra casa. Ya sea un área para el aperitivo o cenas rápidas, para la lectura o incluso para que los niños jueguen. Pensad y reorganizad los espacios en función del uso que vayáis a darle.





Primera impresión.

Vuestra entrada es la primera impresión ( y para algunos la única) que tendrán de vosotros, hacedla original, ¡dirá mucho de los que viven dentro!



Techos altos.

Si no los tenéis…creadlos, pintadlos siempre de colores claros y colgad las cortinas lo más alto posible. Es cierto que pagaréis más tela, pero visualmente el efecto óptico es brutal.



Imaginación al poder.

Conseguid una casa interesante, no solo para las visitas, sino para vosotros que vivís en ella. Poned, quitad, añadid y en definitiva…¡jugad!



Esperamos que os guste y resulte interesante.
Carmen Arcos Muebles.