Sumérgete en un mar de ideas para decorar tu casa de verano.

El estilo veraniego se caracteriza por ser fresco y ligero y por el predominio de los colores claros y los azules del mar. Es la demostración de que la influencia del Mediterráneo alcanza hasta a los hogares, especialmente a aquellos destinados a albergarnos durante las vacaciones, donde solemos buscar la comodidad ante todo. Una distribución sencilla, una decoración poco recargada y materiales naturales ayudarán a conseguirlo.
Si tienes una residencia de verano, cerca del mar o simplemente quieres darle a tu vivienda un toque más estival, hoy compartimos algunas ideas para poner a punto tu casa y que respire ese aire veraniego que tanto gusta. ¿Te apetece seguirme?

Estilo y colores mediterráneos.

Los tonos azules y blancos, aquellos que nos recuerdan al Mediterráneo, son perfectamente transportables a la decoración. Más si se trata de una casa de verano, donde queda cerca el mar, las palmeras, la arena...Utiliza las rayas y los tonos azulados para mezclarlos con el blanco de las paredes o del mobiliario. Verás qué sensación de frescor consigues en tu casa de la playa.


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Apuesta por materiales naturales.

Si algo se agradece en verano es entrar en contacto con la naturaleza; el mar, la arena...
En la decoración, si quieres acertar, elige materiales naturales: la madera (si es de calidad mucho mejor) y el mimbre son materiales muy agradecidos. En cuanto a fibras o textiles, apuesta por el algodón o el lino como materiales estrella.
Con estos elementos tu hogar respirará mucho mejor y la piel te lo agradecerá también, porque la ropa de cama transpirará y así no sudarás tanto. Recuerda que merece la pena hacer una pequeña inversión en las fibra de calidad.


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Casas orientadas y abiertas al exterior.

Otra de las ideas que te proponemos a la hora de orientar tu casa es hacerlo hacia el exterior. Si tienes la suerte de tener espacio y poder elegir hacia dónde mira tu casa de verano, no lo dudes. Trata de crear estancias abiertas, con grandes ventanales, donde prime la luz y fluyan las habitaciones.
Por ejemplo, un salón con grandes puertas y ventanas abiertas al jardín te dará la sensación de tener mayor espacio y sentirás que disfrutas de tu terraza o jardín las 24 horas del día. Otra gran opción es abrir el cuarto de baño al exterior, y así disfrutar de la naturaleza y la luz que asoman por los ventanales.


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Jardines, porches y terrazas: exprímelas al máximo.

Una de las ventajas del verano es poder disfrutar de estancias al aire libre, ya sea en un jardín, un porche, una terraza o en un balcón. En este sentido, trata de decorarlo de forma cómoda y sencilla. Huye de lo recargado. Si te gusta disfrutar de las cenas al aire libre, sitúa una gran mesa con sillas y un buen toldo o cenador para protegerte del verano. Si lo que prefieres es salir a leer un buen libro o continuar una tertulia, entonces una opción ganadora será colocar unos buenos sofás de exterior.


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Detalles estivales que también suman.

Unos farolillos para iluminar tu terraza o jardín, una bonita vajilla con la que decorar la mesa o una flores frescas siempre ayudan a mantener una casa y a darle un toque veraniego y fresco. Tan sencillo como seguir cualquiera de los consejos que acabo de mencionar para obtener un resultado sorprendente.
Elige lo más apropiado para tu residencia estival y apuesta siempre por la sencillez, la comodidad y la calidad en los materiales. Aunque solo sea la casa de verano, los días que pases en ella los disfrutarás mucho más.






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